domingo, noviembre 27, 2005

La Conjura de los necios, John Kennedy Toole



Su figura central es uno de los personajes más memorables de la literatura norteamericana: Ignatius Reilly - una mezcla de Oliver Hardy delirante, Don Quijote adiposo y Tomás de Aquino perverso, reunidos en una persona -, que vive a los 30 años con su estrafalaria madre, ocupado en escribir una extensa y demoledora denuncia contra nuestro siglo, tan carente de "teología y geometría" como de "decencia y buen gusto": un alegato desquiciado contra una sociedad desquiciada. Por una inesperada necesidad de dinero, se ve "catapultado en la fiebre de la existencia contemporánea" embarcándose en empleos y empresas de lo mas disparatado. Los personajes secundarios son tan exóticos y neuróticos como los de una película de los Marx Broters: Darlene la stripteaseuse de la cacatúa; Burma Jonesel quisquilloso portero negro del cabaret"noche de Alegría", regentado por la rapaz Lana Lee, quien completa sus ingresos como modelo de fotos porno; el patrullero Mancuso...

La Conjura De Los Necios es una disparatada, ácida e inteligentísima novela. Pero no sólo eso, también es tremendamente divertida y amarga a la vez. La carcajada escapa por sí sola ante las situaciones desproporcionadas de esta gran tragicomedia.

Ignatius J. Really es, probablemente, uno de los mejores personajes jamás creados y al que muchos no dudan en comparar con el Quijote. Más aún, es el antiprotagonista perfecto para una novela repleta de excelentes personajes, situados en la portuaria ciudad de Nueva Orleans, magistralmente definidos y que suponen el contrapunto exacto al gran Ignatius. Él es un incomprendido, una persona de treinta y pocos años que vive en la casa de su madre y que lucha por lograr un mundo mejor desde el interior de su habitación. Pero cruelmente se verá arrastrado a vagar por las calles de Nueva Orleans en busca de trabajo, obligado a adentrarse en la sociedad, con la que mantiene una relación de repulsión mutua, para poder sufragar los gastos causados por su madre en un accidente de coche mientras conducía ebria.

El autor, John K. Toole, consigue una crítica mordaz de una sociedad americana basada en la decadente clase media. Logra mantener el interés del lector (incluso mayor en una segunda lectura que en la primera) con un abanico de personajes a cuál más desagradable. No deja títere con cabeza y, a través de la tortuosa y enrevesada personalidad de Ignatius, da un repaso a la época que le tocó vivir en un tono de burla que contrasta con la triste visión de las vidas de los personajes retratados.

No encontramos únicamente una loca y angustiosa historia de crítica social, sino que el argumento engancha desde el comienzo. Momento en el que, como dice su protagonista, Fortuna hace girar su rueda hacia abajo y nunca sabemos cual es la desagradable sorpresa que nos depara el destino. A partir de aquí, unas situaciones enganchan con otras, al igual que lo van haciendo los personajes, y se va formando una enorme bola de nieve que terminará estallando al final de la novela.

Tras terminar La Conjura De Los Necios, a sus 32 años, el autor intentó infructuosamente que la publicasen. Ello derivó en una profunda depresión que le condujo al suicidio. Gracias a la tenacidad e insistencia de su madre hoy podemos disfrutar de esta deliciosa obra galardonada con el Premio Pulitzer. También podemos encontrar publicada La Biblia De Neón, novela escrita cuando el autor tenía 16 años.

CRITICA:

Uno de los libros con los que más he disfrutado, en una segunda lectura le he apreciado muchos matices que la primera vez no había reparado. Divertido, muy ingenioso, con unos personajes muy peculiares, y tremendamente entretenido. Una especie de Don Quijote, de la era moderna. Ignatius, el protagonista de esta novela resulta un ser grotesco, pedante, y repelente, pero que en el fondo cae bien. Me encanta la forma en que se cruzan los personajes, que si bien al principio no tienen nada que ver el uno con el otro, al final todos convergen en una misma historia. Una novela de obligada lectura.




1 comentario:

Anónimo dijo...

obra maestra!

tb muy interesante su primera novela, LA BIBLIA DE NEON.